LAREDO, Texas.- Por falsear reportes de la calidad del agua y por organización criminal, junto con siete ex subordinados suyos,
Todos ellos son trabajadores del Condado de Webb en dicha planta potabilizadora de agua y de drenajes y tratamientos residuales, ubicada a 15 millas al suroeste de Laredo.
Isidro Alanís, Fiscal de Distrito de los Condados de Webb y Zapata, dio a conocer lo actuado por su autoridad ministerial, en colaboración con los Rangers de Texas.
Desde agosto de 2013, a raíz de las repetidas quejas de los ciudadanos de Río Bravo y El Cenizo, en el sentido de que el agua para consumo humano, olía y tenía un sabor desagradable, además de que se observaba muy turbia, la Comisión para la Calidad del Agua de Texas (TCEQ, por sus siglas en inglés) inició una investigación sobre reportes falsos de Amaya, como director de dicho servicio público del Condado, así como los siguientes empleados a su cargo.
Cada uno de los ocho implicados, enfrenta tres cargos por alterar reportes de la calidad del agua y uno por organización criminal, pudiendo alcanzar de 180 días de cárcel a dos años por cada cargo de alterar reportes oficiales; y de 2 a 10 años de prisión por la organización delictiva.
Lograron salir bajo caución, los supervisores de agua Luis Alonso Camacho (45 mil dólares de fianza) y de drenaje, Gabino Palomo Cerda (10 mil dólares de fianza).
Además de los trabajadores Jesse Ibarra III, Jesús Gabriel Benavides, José Alfredo Vázquez junior, Aniceto Pardo junior y Primitivo Trujillo Nuñez, todos con 10 mil dólares de fianza cada uno.