ZARAGOZA, España.- En poco más de un año y medio la Universidad de Zaragoza ha reducido en más de un millón de euros las facturas que pagaba por consumo de agua, luz y gas. Este ahorro se debe a una serie de medidas que puso en marcha la institución académica para racionalizar los gastos corrientes y tratar así de reducir la deuda.
En lo relativo al consumo de agua, el trabajo se ha apoyado en campañas de sensibilización, detección de fugas y optimización de los sistemas de riego.
Para conseguirlo, por ejemplo, se ha sustituido el alumbrado público por equipos de iluminación eficiente o de bajo consumo y se han instalado sistemas hardware que contabilizan el consumo y envían la información a un sistema central.
Además, se ha optado por la gestión inteligente de la climatización. Cada día, cada responsable de mantenimiento recibe un mensaje con la previsión meteorológica del día y el horario recomendado de encendido y apagado de la climatización.
Esto, junto con la centralización de la gestión, ha permitido adaptar el consumo a las condiciones meteorológicas reales y, mediante equipos registradores de temperatura y humedad, se realiza un seguimiento para asegurar unas condiciones adecuadas en las instalaciones.