MIAMI, Florida.- A pesar de esta simple regla, algunos hoteles y condominios de Miami Beach llevan años debiéndole dinero de conexión al Departamento de Aguas y Alcantarillado de Miami-Dade (WASD) que se encarga de brindarle servicios de agua a la Playa. Hasta que una auditoría del 2005 reveló que se deben millones de dólares, al parecer nadie en el condado ni en la ciudad lo había notado.
Según documentos del Departamento de Agua y Alcantarillado del Condado, hasta finales de junio, 11 edificios de Miami Beach debían más de 50 mil dólares. En total, deben 2.7 millones de dólares por los gastos de conexión que debían pagarse luego de terminarse la construcción de cada uno de los inmuebles.
En la lista aparecen establecimientos como el Hotel Loews, Portofino Tower y el Hotel Bentley. Algunos de los edificios se construyeron hace tanto que el estatuto de limitaciones del estado —cuatro años— impide que el condado pueda presentar una demanda para cobrar. En alguno de estos casos, la propiedad ha cambiado de dueño.
Bajo una regla que se adoptó en el 2008, la ciudad, que se suponía debía cobrar el dinero, se hizo responsable, desde entonces, por las cuentas que no pagaron los negocios.
La auditoría del 2005, que descubrió que unos 10 millones de dólares habían dejado de pagarse, motivó que se realizaran reformas en el WASD y dejó que el departamento entregara la mitad para el 2007. Se creó una unidad para identificar los edificios y cobrarles el dinero atrasado.
Sin embargo, millones siguen sin pagarse, y nadie puede explicar exactamente como ocurrió eso.
Miami Beach le paga al condado por agua limpia y tratamiento de aguas residuales. A su vez la playa le vende esos servicios a sus residentes.